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Hanna Karina Sandoval

Tradiciones Herméticas

Las Erupciones Volcánicas y los Misterios de la Isla de Pascua

ranorarakuNo he tenido tiempo para escribir un artículo nuevo, me encontraba de viaje en Chile e Isla de Pascua. Estamos observando diversas noticias sobre las erupciones volcánicas que están aconteciendo en el vecino país, pero que también ocurre en las personas, ¿cómo así?

Es el tiempo del despertar de la Kundalini, la serpiente dormida ubicada en los dos primeros chakras que finalmente despierta para una mayor transcendencia espiritual, y el paso abrupto por todos los chakras genera movimientos intensos muy similares a lo que sucede en una erupción volcánica. Mi viaje a dos lugares muy marcados por la presencia de volcanes no fue casual y todo confabuló para que esto suceda puesto que ir a Isla de Pascua es bastante caro, pero cuando las cosas deben suceder el universo conspira para que ocurran, lo que agradezco profundamente porque fue un viaje realmente inolvidable.

Mi mayor aprendizaje en este viaje se trató sobre la energía, la importancia de cuidarla, protegerla y fomentarla, sin la búsqueda de poder. Todavía estoy procesando lo recibido en Isla de Pascua, sentía que muchos de los espíritus de los moais aún estaban vigentes, cosa que los Rapa Nui, (los autóctonos de la isla), creen fervientemente. Estos moais en los diferentes puntos de la Isla son como protectores y vigilantes, y muchas costumbres de los Rapa Nui son muy sorprendentes. Por ejemplo, su parlamento consta de 24 ancianos, y esto coincide con los 24 ancianos de nuestra galaxia, la Vía Láctea, o los 24 ancianos del Apocalipsis o de las Claves de Enoc.

Tomé los tours a Isla de Pascua haciendo los recorridos de cualquier turista, en cuanto el guía decía algo que hacía latir mi corazón, prestaba real atención. Cuando fuimos a Tongariki, donde se ubican 15 moais realmente imponentes, lo que llamó más mi atención fue la montaña al frente de los mismos, que en realidad es un volcán, llamado Rano Raraku, donde se hacían los moais. La fuerza y energía de ese lugar era tan impresionante que me olvidé de los moais y me dediqué a contemplar este majestuoso volcán, con tanto misterio. Se me permitió ver algunas de las entradas pero las aves guardianas comenzaron a gritar, dejándome bien en claro que no era el momento de ingresar. Luego nos dirigimos a Rano Raraku por el otro lado.

En el lugar, el guía nos explicó que el material con el que hacían los moais en el idioma Rapa Nui significa “Piedra de las Pléyades”, lo cual era una nueva confirmación del contacto que habían con Pleyadeanos. La pregunta constante era ¿Cómo trasladaban semejantes moles por toda la isla? El mismo misterio que ocurre con otros lugares como Sacsayhuaman, Stonehenge, Egipto, etc. Sin duda aquellos moais, que evocaban a dignos representantes “ojos de fuego”, al tener total dominio de la kundalini logrando cosas realmente impresionantes más allá de la fuerza física, se llevaron consigo las enseñanzas de sus maestros pleyadeanos.

Y es que todo aquel conocimiento proporcionado, al caer las civilizaciones como Lemuria y Atlántida, debían nuevamente caer en el olvido, hasta que llegue el momento preciso en que la humanidad esté realmente preparada y que las puertas intraterrenas nuevamente se abran, luego de una paciente espera de nuestra evolución. Y es que dar este conocimiento cuando no corresponde es darle una metralleta a un mono, y tal cosa ocurrió cuando los Elohims se unieron a las hijas de los hombres, la transgresión no se dio por el hecho de la copulación, ya que tenía propósitos de experimentación genética, el problema fue cuando entregaron el conocimiento “del cielo” a sus hijos cuando el nivel de consciencia no lo ameritaba.

En un momento dado pude estar “a solas” con algunos moais cuando los turistas se fueron a otro lado, y la información sobre la energía era contundente, y en especial en el hecho de no caer en “búsquedas de poder” cuando hay obsesión por preservar el semen mediante el sexo tántrico, lo que daba pie a hombres a estar con muchas mujeres que servían como batería para volverse poderosos. Si bien sabían que ayacular era desperdiciar un gran potencial de creación, se llevó esta práctica para buscar poder, y esto llevó a cometer transgresión.

Mi fuego interno explotaba dentro de mí. Yo le preguntaba a Dios, ¿para qué es esto? La fuerza era tan grande que llegaba hasta mi cabeza pero sin llegar a erupcionar. Sólo tengo la certeza de transmitir todo lo que se sobre la energía. Y como nada es casual, mi hermana del camino, Karina Zarfino, quien me hospedó en Chile, ha publicado un libro titulado “Las Relaciones Energéticas en la Pareja”, enfocado a las relaciones, lo cual es una confirmación y sintonía en los mensajes. Se me dijo que la kundalini solo despertará en las personas cuando logran preservan un mínimo de energía cuantificable, claro está que la mayoría de las personas “desperdician”, y “desechan” su energía al tener relaciones sexuales inconscientes, o cayendo en iras, depresiones, victimización, manipulaciones, etc. Toda una gran cantidad de razones por las cuales la gente pierde energía y no puede transcender.

También tuve la oportunidad de ver dos ovnis a plena luz del día, estos no se mostraron en la dimensión física, los pude ver a través del rabillo del ojo, que logré “enfocar”. Estaban tan cerca y era tan evidente que los saludé con mi mano. Su presencia en la isla es contundente y evidente, así como de los seres intraterrenos. Mi cámara captó cómo la llama trina cubre al lugar, evidencia de consciencia crística.

Es el tiempo hermanos, es el tiempo, hay mucho camino por recorrer y el trabajo es interno, mucho se ha buscado por fuera, las respuestas están en el interior. Salgamos de aquellos campos mórficos que generan situaciones repetitivas que lo único que hacen es hacernos perder energía. Nuestro campo energético es fundamental para abrir el velo de lo oculto, que ya está solo para descubrirlo porque ya no hay nada restringido. La Madre Tierra se purifica a través del fuego sagrado, limpiando sus canales para que la Kundalini fluya sin obstáculos. A nosotros nos corresponde hacer lo mismo en nuestro interior. Así es.